El Antónov An-225 Mriya era el avión más grande del mundo, un icono de la aviación cuya envergadura, esto es, la distancia total de la punta del ala a la otra era de 88,40 metros, dimensiones colosales si se tiene en cuenta que la del gigantesco Airbus A380 no llega a los 80 metros. Del An-225 solo se construyó una unidad, cuya base se hallaba en el aeropuerto ucraniano de Hostomel, a escasos kilómetros de Kiev, uno de los puntos de los enfrentamientos entre las fuerzas armadas de Rusia y Ucrania.
Este domingo, sin embargo, se confirmaron los peores presagios: la agencia Reuters informó de que el avión de carga fue incendiado en un ataque ruso, según habría confirmado el fabricante de armas estatal ucraniano Ukroboronprom en su página de Facebook: "Los ocupantes rusos destruyeron el avión insignia de la aviación ucraniana, el legendario An-225 Mriya". Rusia ha apuntado a señalado al avión como un símbolo de las capacidades de la aviación ucraniana.